Kazushi Ono dirige este fin de semana su último programa como director titular de la Orquesta Sinfónica de Barcelona. El maestro japonés cierra así una etapa al frente de la OBC que comenzó en 2015 y que culminará los próximos días 27, 28 y 29 de mayo con la Sinfonía n . 2 “Resurrección” de Gustav Mahler. Un concierto que, además, será la clausura de la temporada de la OBC.

El primer concierto de Kazushi Ono con la OBC fue el 20 de septiembre de 2015 en la basílica de la Sagrada Familia y, desde entonces, su labor intensiva con la orquesta le ha llevado a abanderar la gira de cinco semanas en Japón de 2019 -donde se interpretó la ópera Turandot de Puccini con la soprano Iréne Theorin y una nueva puesta en escena de Àlex Ollé-, la integral de sinfonías de Brahms o la participación en el Festival Beethoven. De este último compositor, cabe destacar también la dirección de la Novena Sinfonía en la Sala 1 Pau Casals con propuesta escénica de Agrupación Señor Serrano , que logró tres días de sold out en L’Auditori.

Además, la implicación del maestro Ono con la música de nueva creación le ha llevado a dirigir estrenos absolutos de Héctor Parra, Ferran Cruixent, Fabià Santcovsky o Mariona Vila, en este último caso como parte del proyecto Et toca a tu. En el ámbito discográfico, hay que poner de relieve la grabación del disco Los ballets de Picasso, que recoge algunos de los ballets de Falla, Stravinsky , Satie y Milhaud que contaron con la escenografía y figurinismo de Pablo Picasso.

Del mismo modo, Kazushi Ono ha sido una pieza fundamental en el proceso de renovación de la OBC, que ha abierto nuevas plazas para músicos en los últimos años, y se ha implicado activamente en la búsqueda de la excelencia musical y la cohesión sonora del conjunto.

A partir de septiembre de 2022, Kazushi Ono asumirá la titularidad de la Filarmónica de Bruselas y, desde L’Auditori, se está trabajando para encontrar fecha para que vuelva a dirigir a la OBC como director invitado en las próximas temporadas.

Respecto al concierto que dirigirá este fin de semana, Ono se rodeará de dos solistas estrechamente vinculadas al repertorio alemán y de gran renombre internacional, como son la soprano Lydia Teuscher y la mezzosoprano Mihoko Fujimura. Un reparto que completarán la OBC y el Orfeó Català y que será un gran fin de fiesta para la temporada de la orquesta, que en las próximas semanas realizará grabaciones discográficas con su nuevo titular, Ludovic Morlot, y que se preparará para el Festival Mozart Nits d’estiu, que empezará el 30 de junio.

La Sinfonía n. 2 Resurrección de Gustav Mahler parte del vasto conjunto orquestal empleado en Titán para ensancharlo con la introducción de la voz humana, con el uso de solistas y corazón, un rasgo que será característico de sus sinfonías posteriores. Se trata, igualmente, de la primera obra en la que Mahler utiliza textos de la recopilación Des Knaben Wunderhorn: Alte deutsche Lieder, un conjunto de poemas y canciones tradicionales alemanas compilado en 1805 y que se convirtió en una fuente inagotable de recursos para su producción.

La obra fue inicialmente concebida como un poema sinfónico de un solo movimiento de carácter fúnebre. Posteriormente, y a partir de la muerte del director Hans von Bülow, el compositor introdujo otros cuatro movimientos para erigir una construcción sinfónica monumental sobre la muerte, el recuerdo de la felicidad, la pérdida y el recobro de la fe y, finalmente, la resurrección a través del amor en manos de Dios.

Una sinfonía que enlazará el tema de Amor y Odio que ha impregnado la programación de L’Auditori durante esta temporada con el de Muerte o Retorno que podremos disfrutar en la próxima.