La Orquesta de Cámara Mahler (OCM), fundada en el 1997, tiene un sonido único y una identidad artística independiente. La filosofía de la Orquesta, inspirada por su fundador Claudio Abbado, hace hincapié en el poder de la escucha y la comunicación, estructural y musicalmente, de modo que la Orquesta, sus músicos y su dirección funcionan como un colectivo democrático. Colabora con socios artísticos como Mitsuko Uchida, el asesor artístico Daniele Gatti y el socio artístico para experiencias inmersivas Henrik Oppermann/Schallgeber, y lleva a cabo proyectos plurianuales.

Con músicos de 27 nacionalidades residentes en todo el mundo, la OCM llega al público de 40 países y 5 continentes. Entre las residencias de la Orquesta figuran el Carnegie Hall y el Festival de Saint-Denis. Son invitados frecuentes de la Filarmónica de Berlín y el Beethovenfest de Bonn, y realizan giras periódicas por Iberia y Asia. Así, se relacionan con públicos de todo el mundo y crean conexiones a través de fronteras y culturas.

En educación y divulgación, la OCM tiene tres proyectos emblemáticos: la Academia OCM, en la que los miembros de la orquesta comparten su experiencia con nuevos músicos en colaboración con OrchesterzentrumlNRW y residencias en la Konzerthaus Dortmund y la Kölner Philharmonie; Feel the Music, que presenta la música a niños sordos o con dificultades auditivas, y Heimat, un formato de concierto en el que los estudiantes realizan un viaje multicultural que fomenta la introspección sobre el tema de la “pertenencia”, todo ello poniendo de relieve el compromiso de la OCM de enriquecer las vidas a través de la música y promover la inclusión.

En colaboración con Henrik Oppermann/Schallgeber, la OCM explora nuevas tecnologías digitales dentro y fuera de la sala de conciertos. Su serie de realidad virtual acerca a los oyentes a la música.

Gracias a sus vibrantes actuaciones, su alcance global y sus iniciativas educativas, la OCM tiene un profundo impacto en el mundo de la música clásica.