Este año se celebra el décimo aniversario de la muerte de Josep Guinovart y la Fundación ‎Privada Espai Guinovart Agramunt ha impulsado el Año Guinovart.‎

Durante todo el año, se ha organizado un amplio programa de exposiciones, lecturas, ‎conciertos y otras actividades para redescubrir al artista que durante más de setenta años ‎trabajó la pintura, la escultura, el grabado, la ilustración, la escenografía y el cartelismo.‎

Dentro de esta propuesta de actividades se enmarca la muestra GU-INNO-VART del Museu ‎de la Música de Barcelona y que se podrá ver desde este 14 de junio hasta el 7 de octubre de ‎‎2018. GU-INNO-VART hace un recorrido por los diferentes estilos musicales que inspiraron ‎buena parte de su obra: desde la reinterpretación de un preludio de Chopin hasta los dedos ‎de Carles Santos que se convierten en teclas de un piano.‎

‎Sona Guinovart, música per a un quadre. ¡Participa en el ‎concurso!‎

Guinovart reinterpretó el cante jondo, escenificó la ópera Aida de Verdi en un cuadro y puso ‎color al blues. Y vosotros, ¿os atrevéis a hacer vuestra interpretación de la obra de Josep ‎Guinovart?‎

El Museu de la Música de Barcelona ha organizado un concurso para todos aquellos que se ‎acerquen a ver la exposición GU-INNO-VART. Se trata de Sona Guinovart, música pper ‎a un quadre, un concurso interactivo que anima a los visitantes a versionar libremente ‎la obra del artista.‎

‎¿Cómo? ¡Muy fácil!‎
En el vestíbulo del Museu hay un piano y una reproducción de una obra de Guinovart. Solo ‎hay que sentarse al piano (no importa si sabes tocarlo o no. ¡Atrévete!) y grabar un vídeo ‎haciendo una interpretación propia de la pieza de Guinovart. Sube el vídeo a las redes ‎sociales con la etiqueta #SonaGuinovart, menciona el Museu de la Música, la Fundación ‎Guinovart y la ESMUC y ya está listo. El concursante con más likes se llevará un premio: ¡un ‎grabado original de Guinovart!‎

‎Josep Guinovart‎
Josep Guinovart (1927 – 2007) fue uno de los máximos exponentes de la vanguardia plástica ‎catalana y española de la segunda mitad del siglo XX, y encarna como pocos la figura del ‎artista en constante mutación, ansioso de interactuar con la realidad de múltiples maneras. ‎Por eso podemos decir que se reinventa constantemente – realista, expresionista, matérico, ‎informalista, abstracto: ninguna de estas etiquetas lo abarca en toda su complejidad – y ‎concibe su obra como un proceso de búsqueda inacabable en cuanto al uso de técnicas, ‎soportes y materiales.‎
A menudo situada a medio camino entre la pintura y la escultura, la obra de Guinovart es un ‎medio para atrapar la realidad, para hacerla suya y poseerla, para incidir en ella, para recrearla, ‎para transformarla, pero nunca para representarla ni emularla. Dotado de una personalidad ‎explosiva como pocos, somete sus múltiples estímulos -naturales, urbanos y culturales- a un ‎aparente proceso de desintegración formal con el fin de recomponerlos, inyectarles nueva ‎vida y hacerlos renacer. ‎
‎Àlex Susanna‎
Comisario del Any Guinovart